Cenotes, Tren Maya y la Comisión Interamericana
Cenotes, Tren Maya y la Comisión Interamericana
Por Carlos Escoffié
Hoy ese caprichoso milagro llamado sistema de cenotes se encuentra amenazado por la contaminación, la deforestación, el uso de plaguicidas, la agroindustria y la ganadería a gran escala. Y por si fuera poco, un tren.
La Península de Yucatán es una esponja: piedra hueca, somera, kárstica, tan impresionante como susceptible. Una voz popular dice que su extraña composición se debe a su prematuro nacimiento geológico, cuando un meteorito la obligó a salir a la superficie. Quizá por eso está llena de ríos subterráneos, que de vez en cuando se asoman al exterior a través de puertas en la tierra que parecen cráteres. Como haya sido, los cenotes han permitido la vida en esta región en la que México y Centroamérica se encuentran. Hoy ese caprichoso milagro llamado sistema de cenotes se encuentra amenazado por la contaminación, la deforestación, el uso de plaguicidas, la agroindustria y la ganadería a gran escala. Y por si fuera poco, un tren que amenaza a la distancia.
Este fin de semana, la Asamblea de Defensores del Territorio Maya Múuch Xíinbal y el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible solicitaron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que emita medidas cautelares para proteger al sistema de cenotes como parte integral del territorio de distintas poblaciones indígenas, el cual se ve gravemente amenazado por la construcción del proyecto denominado “Tren Maya”. La solicitud se hizo a favor de dieciséis comunidades mayas de Yucatán, Campeche y Quintana Roo, así como a favor de la población maya que se encuentra en las ciudades de Mérida y Valladolid.
Como es ampliamente conocido, el proyecto del “Tren Maya” no posee estudios de impactos sociales y ambientales, a pesar de que su operación requeriría concesiones y permisos para carga y descarga del agua para la construcción de nuevas ciudades,1 nuevas zonas hoteleras,2 parques agroindustriales3 y las distintas estaciones.4 No se tiene información –o al menos no se ha hecho pública- sobre cuáles serían los efectos que tendría en el sistema de cenotes, del cual depende el ejercicio del derecho al agua y al territorio indígena de la población maya en la zona.
Existen múltiples estudios que reflejan no sólo la vulnerabilidad de los suelos de la Península de Yucatán5, sino también el alto grado de contaminación que actualmente sufre por las descargas de aguas residuales.6 Por ejemplo, en una investigación de Roger Amílcar González Herrera, Beth Sua Iztaccíhuatl Albornoz Euán, Ismael Abelardo Sánchez y Pinto y José Humberto Osorio Rodríguez, se señala que el agua del 55% de los cenotes en Yucatán estaría contaminada, “muy contaminada” o “es peligrosa”.7 Otro estudio de Almira L. Hoogesteijn Reul, José Luis Febles-Patrón y Violeta Amapola Nava-Galindo señala que, de una muestra de 48 cenotes de uso turístico distribuidos a lo largo de la región, todos están contaminados por coliformes totales o fecales.8 Por su parte, Sergio Grosjean Abhimeri ha indicado que el 70% de los cenotes estarían contaminados.9
Toda la Península de Yucatán experimenta una crisis de contaminación del agua en los cenotes,10 como lo han demostrado casos paradigmáticos como Homún11, San Antonio Chel12, Kinchil13 y Hampolol.14 Esta situación que debiera ser en sí misma motivo de alarma para el Gobierno Federal y los tres gobiernos de la Península de Yucatán, no ha sido suficiente ni siquiera para que se decidan a realizar los estudios de impacto ambiental para el “Tren Maya”, a los cuales están obligados conforme al derecho internacional.15
Por si fuera poco, recientemente se dio a conocer el Resumen Ejecutivo del documento “Territorios mayas en el paso del tren: situación actual y riesgos previsibles” elaborado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). En dicho texto se señala que el “Tren Maya” podría aumentar el deterioro de los humedales, la presión sobre el recurso hídrico y la contaminación de las aguas subterráneas.16 De igual forma, en septiembre de 2019 la Comisión de Asuntos Frontera Sur de la Cámara de Diputados de los Estados Unidos Mexicanos emitió la “Ficha Técnica del Tren Maya: aspectos legislativos, ambientales, económicos y socio-culturales”, en la cual se señala que el investigador de ECOSUR, Dr. Alejandro Morón Ríos manifestó los efectos negativos del “Tren Maya” sobre el acuífero subterráneo dada la descarga de aguas residuales.17
Los pueblos mayas y las personas no-mayas de la Península de Yucatán tenemos derecho a los cenotes. De ellos depende tanto el equilibrio ecológico, como la flora, fauna y la posibilidad de asentamientos humanos en la región. Es por esto que llamado de auxilio a la CIDH es una oportunidad para llamar la atención de los tres órdenes de gobierno antes de que llevar a su punto más alto el proceso de degradación ambiental que inició hace un par de décadas con un modelo industrial que pretende hacer uso infinito de lo que es preciado por escaso.
Sería lo ideal que la CIDH atienda la solicitud y le exija al Estado Mexicano adoptar medidas cautelares para evitar daños irreparables al sistema de cenotes en la Península de Yucatán. Pero más aún lo sería que se viera una reacción a nivel interno, dado que las acciones u omisiones que esta administración ratifique de las anteriores comprometerán el acceso al agua de las generaciones futuras.
@kalycho
1 Véase: La Jornada Maya. “El tren Maya detonará parques agroindustriales”, 21 de enero de 2020. Disponible aquí. La Jornada Maya. “Haremos “nuevas ciudades” por el tren maya: Raúl Bermúdez”, 12 de noviembre de 2018. Disponible en formato digital a través de este enlace. Proceso. “Una falacia” que el Tren Maya sea neoliberal: Fonatur”, 26 de diciembre de 2019. Disponible del formato digital a través de este enlace.
2 Véase: El Financiero. “Esta hotelera española ve oportunidades con el Tren Maya”, 16 de abril de 2019. Disponible en formato digital a través de este enlace. Reportur. “Hoteleras españolas analizan abrir en ciudades donde pare Tren Maya”, 6 de febrero de 2019. Disponible en formato digital a través de este enlace.
3 Véase: La Jornada Maya. “El Tren Maya detonará parques agroindustriales”, 21 de enero de 2019. Disponible en formato digital a través de este enlace. La Verdad. “Tren Maya: no se despojará a pueblos originarios de sus tierras, asegura FONATUR”, 20 de enero de 2020. Disponible en formato digital a través de este enlace.
4 Véase: El financiero. “Maxcanú, El triunfo y Calkiní, los nuevos polos de desarrollo del Tren Maya”, 15 de abril de 2019. Disponible aquí. La Jornada Maya. “Tren Maya: más estaciones, menos costos: Fonatur”, 09 de enero de 2020. Disponible aquí.
5 Bolio Barrios Emilio R. ; Cabrera Sansores Santos A. ; Bautista Zúñiga Francisco; Pacheco Ávila Julia G. Uso de la metodología EPIK para determinar la vulnerabilidad del agua subterránea a la contaminación en Yucatán, México,Teoría y Praxis, Publicación semestral, año 7, núm. 9, 2011, Cozumel Quintana Roo, México. Disponible aquí. González Herrera; Albornoz Euán; Sánchez y Pinto; Osorio Rodríguez, El acuifero Yucateco. Análisis de riesgo de contaminación con apoyo de un sistema de información geográfica, Revista Internacional de Contaminación Ambiental. 34. 667-683. 10.20937/RICA.2018.34.04.09. junio 207- febrero 2018. Disponible aquí.
6 Gobierno del Estado de Yucatán. Decreto 793. POETY, 26 de julio de 2007, pág. 8.
7 Roger Amílcar GONZÁLEZ HERRERA, et al. “El Acuífero Yucateco. Análisis del riesgo de contaminación con apoyo de un sistema de información geográfica”, Rev. Int. Contam. Ambie. 34 (4) 667-683, 2018, DOI: 10.20937/RICA.2018.34.04.09. Disponible en formato digital a través de este enlace.
8 Hoogesteijn Reul, Almira L.; Febles-Patrón, José Luis; Nava-Galindo, Violeta Amapola, La contaminación fecal en cenotes de interés turístico y recreacional del estado de Yucatán, Ingeniería, vol. 19, núm. 3, 2015, pp. 169-175 Universidad Autónoma de Yucatán Mérida, México. Disponible aquí.
9 Véase: Diario de Yucatán. “El 70% de cenotes, está contaminado”, 28 de septiembre de 2018. Disponible en formato digital a través de este enlace.
10 Véase: Diario de yucatán. “Poblaciones de Yucatán envenenadas por la contaminación del agua”, 9 de diciembre de 2019. Disponible aquí; Expreso de Campeche. “Agua de Campeche está contaminada: Semarnatcam”, 22 de abril de 2016. Disponible aquí.
11 Véase: La Jornada Maya. “Homún, en zona de alta vulnerabilidad a contaminación acuífera”, 29 de octubre de 2018. Disponible aquí; Diario de Yucatán. “Corte analizaría caso de megagranja porcícola de Yucatán”, 10 de marzo de 2020. Disponible aquí.
12 Véase: Animal político. “Cerros de excremento enferman a la población y contaminan cenotes en Hunucmá, Yucatán”, 20 de noviembre de 2019. Disponible aquí. Diario de Yucatán. “Una granja contamina”, 17 de junio de 2019. Disponible en: https://www.yucatan.com.mx/yucatan/una-granja-contamina.
13 Véase: Por esto! “Riesgo de contaminación del agua en Kinchil”, 25 de octubre de 2018. Disponible aquí; La verdad. “Brutal contaminación en Kinchil, autoridades no toman cartas en el asunto”, 13 de enero de 2019. Disponible aquí.
14 Véase: Campeche. “Ejidatarios denuncian contaminación de ojos de agua en Hampolol”, 19 de mayo de 2016. Disponible aquí; Desde el Balcón. “Contaminación del río de Hampolol podría ser irreversible”, 30 de julio de 2016. Disponible aquí.
15 Corte IDH. Opinión Consultiva OC-5/85 de 13 de noviembre de 1985. Serie A No. 5. supra nota 1. Corte IDH. Medio ambiente y derechos humanos (obligaciones estatales en relación con el medio ambiente en el marco de la protección y garantía de los derechos a la vida y a la integridad personal – interpretación y alcance de los artículos 4.1 y 5.1, en relación con los artículos 1.1 y 2 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos). Opinión Consultiva OC-23/17 de 15 de noviembre de 2017. Serie A No. 23.
16 CONACYT. “Territorios mayas en el paso del tren: situación actual y riesgos previsibles” (Resumen Ejecutivo), diciembre de 2019. Disponible en formato digital a través de este enlace.
17 Cámara de Diputados. “Ficha Técnica del Tren Maya: aspectos legislativos, ambientales, económicos y socio-culturales”, Septiembre 2019, pág. 23. Disponible en formato digital a través de este enlace.
