Ejidatarios de Sinanché rechazan parque eólico
Afirman que la empresa los engañó
Don Severiano Gutierrez/Foto: Haizel de la Cruz
Ejidatarios del municipio de Sinanché ratificaron ayer su rotundo rechazo a la construcción de un parque eólico en ese municipio, en vista de la serie de irregularidades, asambleas amañadas y la forma como se asignaron los terrenos para las instalaciones.
Luego de un recorrido, el comisario ejidal Severiano Gutiérrez Celis enfatizó que los ejidatarios no permitirán que se instale el parque eólico en vista de que ya interpusieron una demanda ante el Tribunal Agrario.
Gutiérrez Celis recordó que en el 2014 les propusieron un parqué eólico y la adquisición de tierras mediante concesión y/o renta terrenos ejidales para ese fin por parte de la empresa Fuerza y energía limpia de Yucatán y Kukulcán.
El comisario anterior, Nicolás Chunab Celis (q.e.p.d.), firmó poderes para que la empresa pueda trabajar en terrenos ejidales de Sinanché, pero en los archivos de la comisaría no hay ningún documento que avale todo lo realizado por la extinta autoridad ejidal.
Los de la empresa se presentaron a la asamble junto con un funcionario de la Procuraduría Agraria que fungió como mediador entre la empresa y el ejido; hubo asambleas y se aprobó un primer contrato de renta a nombre de Fuerza y energía limpia de 1,089 hectáreas de terreno.
Sin embargo, los representantes de la empresa presentaron el proyecto de palabra y no por escrito ante un notario público, lo que creó confusión.
El comisario Severiano Gutiérrez detalla que los empresarios hablaron de rentar los terrenos ejidales por 126 pesos cada seis meses por hectárea y que cuando comenzaran a trabajar los aerogeneradores darían 2 mil pesos al mes por ejidatario y la gente se fue con la finta.
Sacamos cuentas, el resultado es que ellos pagan la pírrica cantidad de 70 centavos por hectárea al día, lo que es un engaño y fraude, considerando la millonaria derrama económica que genera este tipo de energía al año para los empresarios.
Gutiérrez Celis recuerda que, poco después del 2015, se realizan dos pagos y la empresa notificó al ejido que requería más terrenos: 587 hectáreas más para línea de transmisión de los aerogeneradores.
A final de cuentas la empresa les dio un único pago de 400 pesos por las 587 hectáreas para las torres de transmisión.
Gutiérrez Celis detalló que la renta de terrenos de 1,087 hectáreas es a un plazo de 30 años y con prórroga automática de 30 años más.
Las 587 hectáreas se saldaron en un pago único de 300 pesos, no fueron 400 porque ellos le quitaron 100 de impuestos y gastos administrativos.
El informante mencionó que el proyecto se los dieron por cucharadas, además los empresarios dieron de alta al ejido ante Hacienda con el pretexto de justificar gastos ya que ellos verían contabilidad y pagos de impuestos, lo cual fue mentira, pues la empresa jamás vio la contabilidad del ejido y mucho menos pagó los impuestos correspondientes a dos transacciones por 536 mil pesos y otra por 278 mil pesos por concepto tierras.
—Las irregularidades que hallé derivan en esta demanda: no hay documentos que avalen las transacciones anteriores y ahora el ejido pide anulación de contratos firmados por difunto comisario y avalado por mis antecesores, añadió Severiano Gutiérrez.
Para los efectos de la demanda, ya tenemos aval de la asamblea, metimos demanda ante Tribunal Agrario, se han realizado tres audiencias y vienen más.
Ahora falta que el comisariado presente ante el Tribunal Agrario el documento de acta de asamblea para respaldar la demanda en contra de la empresa y la suspensión del proyecto.
La meta es tirar el proyecto del parque eólico por irregularidades, además del impacto ambiental.
Para que Fuerza y Energía Limpia pudiera avalar su proyecto incurrió en toda clase de falsedades, autoridades estatales y federales se coludieron, la Semarnat, la Seduma principalmente, ya que en el área donde se pretende construir el parque hay numerosos cenotes, se produce miel y se trabaja el campo.
El entrevistado mencionó que quieren que se anule proyecto por irregularidades, porque no hay contratos y porque la empresa facturó al ejido cantidades exorbitantes que no llegaron a manos de los ejidatarios; ahora el SAT exige el pago de los impuestos de los recursos recibidos y por los cuales se emitió un par de facturas.
El ejido no tiene recursos para pagar impuestos de dinero que no ingresó, además de los recargos e impuestos atrasados, dijo.
El posicionamiento del ejido de Sinanché se da a pocas horas que se inaugure el parque eólico de Dzilam de Bravo.
(José Manrique)
